martes, 15 de noviembre de 2016

Cyborg



Os voy a contar una historia: Antes de que me picara el gusanillo de la serie B, la exploitation y la caspa en general, ya era un amante de la ciencia ficción. A parte de eso, soy del 90, así que viví los últimos coletazos del videoclub. Recuerdo perfectamente ir con mi padre y alquilar pelis de la Cannon o de Sáenz de Heredia (he heredado el buen gusto por el cine).
Esto hizo que, a parte de la ciencia ficción, me flipara bastante con las pelis de acción: Stallone, Chuck Norris, Schwarzenegger, Van Damme... Respecto a este último, cierto glorioso día cayó en mis manos Soldado universal y, joder, como lo flipé: ¡Una peli de ciencia ficción, en la que se enfrentaban nuestro belga favorito contra Ivan Drago! Y, os estaréis preguntando, esto a qué cojones viene. Pues bien, al poco, y aún con el subidón en el cuerpo, me dispuse a ver otra peli de ciencia ficción de Van Damme. Post-Apocalíptica, además. Hostia, pensé, le dará mil vueltas. Craso error. En mi tierna adolescencia aún no sabía quien era el puto Albert Pyun. Recuerdo que duré unos veinte minutos y que la tuve que quitar porque me dolía la cabeza muchísimo. Hoy, sin embargo, nos agarramos los machos y vamos a intentar acabar lo que en su día empecé. Sí, hoy os traigo Cyborg.
La peli empieza con la típica voz en off explicativa, que en realidad no explica una mierda y que, boom!, resulta ser la del malo. Que esto podría ser una sorpresa o algo gracioso, sino fuera porque se sabe a los 3 minutos de peli. Básicamente, el escenario que nos presente es este: típico futuro post-apocalíptico fusilado de Mad Max. Los científicos han conseguido desarrollar una cura para la peste (¿?), pero el malo la quiere porque sí. Por sus santos cojones, porque para algo es el malo.
Después de títulos de crédito y mierdos de estos, podemos decir que empieza ya la peli de verdad. Una mujer huye por la ciudad, mientras la persiguen un grupo de encapuchados. Por suerte, aparece nuestro héroe (y el de Donald Trump) repartiendo estopa para salvarla y, de paso, explicarnos ya toda la peli, porque gracias a uno de los diálogos más absurdos que he visto en mi vida, descubrimos que la chica es un ciborg y tiene la información necesaria para desarrollar la vacuna (que según la voz en off del principio ya estaba desarrollada, pero bue, eso da igual) así que tiene que ir a Atlanta.
Sin embargo, los malos llegan, la secuestran, hacen cosas de malos (es decir, matar por matar casi siempre fuera de plano. Sí, nuestra amiga la acción fuera de plano ha vuelto) y pillan un barco para llevarla a Atlanta. Un barco para ir de Nueva York a Atlanta. Repito, de Nueva York a Atlanta. No es que se me dé demasiado bien la geografía, así que me he dicho, vale, vamos a buscarlo en google. 873 millas separan Nueva York de Atlanta. 873 millas son 1404km, es decir lo que hay de Barcelona a Mladá Boveslav. De NY a Atlanta se tarda 2 horas y 20 minutos en avión y unas 14 horas en coche (No veas esta peli, el blog que te enseña y te divierte). Google no me da datos sobre el tiempo que se tarda en barco porque Atlanta no tiene costa. ATLANTA NO ES UNA CIUDAD COSTERA. En barco. Un viaje que ya es la hostia de largo de per sé, pues vamos a hacer un rodeo de la vida que total, sólo hay que desarrollar una vacuna para salvar la humanidad que, bueno, me voy a quedar porque la humanidad no me gusta. ¿Queréis saber lo mejor de todo? Sólo llevamos 10 minutos de peli. J.

A todo esto, Van Damme, al que había noqueado los malos, se despierta y decide ir a buscar al ciborg. ¿Por qué? Porque sí, hostia, que si el malo no necesita motivación, el tampoco. Espera, espera, que me he adelantado. Flashback explicativo. Van Damme con pelazo. Vale, lo hace todo por venganza. Un malo sin un motivo contra un bueno con un cliché. Biiiiiiien. Van Damme se encuentra a una chica random y, en ese seguir con estos diálogos buenos, buenos, descubrimos que en verdad a Van Damme se la suda tres cojones la ciborg y la vacuna, sólo quiere encontrar a Fender (deducimos que Fender es el malo). Lo cual me hace plantearme una cosa: ¿cómo cojones sabe Van Damme que Fender ha secuestrado a la ciborg, si lo noquean antes de que aparezca?

Cannon y Albert Pyun, ¿qué podría salir mal? TODO

La trama avanza (jejejej, no) y seguimos con más putos flashbacks de Van Damme, que, en realidad, nos conducen a lo que ya sabemos: Van Damme (que por cierto, se llama Gibson) protegía a una chica y sus hijos, se enamora de ella, se casan y Fender los mata a todos. Algo que ya hemos deducido en el primer flashback, Puym. Puyn. Albert Pyun. Albert Pyum. Reconozco que nunca he sabido escribirlo sin buscarlo y eso que son 4 putas letras. Vale, Albert Pyun. 


El malo no tendrá motivación, pero lleva hombreras.

Con el puto ritmo raruno este que tiene la peli, llevamos ya media hora y, hostias, no ha pasado nada. Que yo recordaba que las pelis de la Cannon tenían acción, había hostias, explosiones y esas cosas. Pero joder, toda la acción fuera de plano, muchas vueltas a lo torturado que está un Van Damme que sólo ha pegado una patada. Sólo una en media hora. Gibson (por cierto, no voy a comentar el easter egg obvio de que los protas se llamen Gibson y Fender) decide que, como ellos van a pie, pues deben tomar un atajo. Recordemos, 1404km a pie. Los que deciden ir en barco a una ciudad sin costa vs los que se hacen 1400km a pie. Y ya que recordamos, recordemos también que es un puto mundo post-apocalíptico, lleno de peligros y tribus. Y VAN ANDANDO. Obviamente, como era de esperar, les atacan, lo que nos sirve como excusa gratuita para ver a Van Damme dando hostias, lo que en otra peli a lo mejor sería criticable, pero en esta ya era hora, joder.

El pelazo de Van Damme, el auténtico héroe de la peli.

Gibson y moza (que aún no han dicho su nombre, pero viendo el nivel, probablemente se llame Ibanez o Jackson) deciden acampar en una playa donde saben que Fender va a parar, lo cual nos sirve para volver a ver a los auténticos protagonistas de la peli: los flashbacks y los diálogos absurders. Porque sí, no sólo vemos otro puto flashback de Van Damme, sino que también uno de la ciborg, donde vemos porque se ha convertido en ciborg y esas mierdas. Entre flashback y flashback, la peli avanza, o bueno, o algo, así que Fender llega la playa y Gibson decide confrontarlo. Él solo, contra todo su ejército. Sí, es una película de superdotados, como podemos ver. Obviamente, como la peli en general, sale todo mal. El ejército acorrala a Van Damme y, flashback mediante, vemos que una de las hijas de la chica que protegía en los otros flashbacks está con Fender. ¿Habéis entendido algo, o me explico igual de mal que el puto Pyun?

No lo he dicho, pero aparte de un ritmo de mierda, tiene unos efectos especiales cutrerrimos.

Gibson les hace el lío a todo el ejército de malos (recordemos que quieren ir a Atlanta en barco, así que tampoco era muy difícil) y huye, aunque por el camino se deja atrapar otra vez (recordemos que quieren ir a Atlanta andando). Fender crucifica a Gibson, lo que en realidad es una excusa para meternos otro puto flashback. Sin embargo, se acaba liberando, lo que convierte esta peli en un puto despropósito. Más aún. Los malos siguen su camino a pie (madre de Dios) mientras Fender discute por qué deberían llevar al ciborg a Atlanta. Una hora y cinco minutos después. A ver, recapitulemos, porque  esto ya empieza a ser ridículo. Fender, nada más empezar la peli, mata al acompañante del ciborg, ataca a Van Damme y la secuestra. La obliga a ir a Atlanta bajo amenazas para poder quedarse la vacuna. Mata a toda una población costera y roba un barco para ir a Atlanta. Por el camino vuelve a atacar a Gibson. En todo esto, además, muere una cantidad considerable de sus hombres. Es decir, es él el que busca al ciborg, es él el que le obliga a seguirle y es él el que decide ir a Atlanta. Una hora de peli después se plantea porque coño hace las cosas. Me cago en tu puta madre, Pyun.
  


Los malos, Gibson y muchacha llegan a Atlanta (¿Cómo? Aaah, la magia del cine) y se vuelven a enfrentar. Entre Gibson y la chica se cargan al resto de los malos, así que el escenario es el siguiente: por un lado, la chica y el ciborg y, por otro, Fender, Gibson y la hija de la chica de los flashbacks. Vamos, que se avecina pelea final. El problema: que Pyun tiene un ritmo narrativo nulo y no es que sepa plasmar de una manera brillante las emociones. Así que intenta crear una pelea emotiva, donde la hija de redime, donde la otra chica se sacrifica y donde Gibson saca fuerzas después de parecer derrotado y, junta toda su ira para partirle la cara a Fender. Por desgracia, le queda una pelea aburrida e increíblemente previsible, hasta en su supuesto giro inesperado. Con Fender muerto, en una actuación que sonrojaría a Marion Cotillard, Gibson y la hija llevan al ciborg a donde los científicos y ale, y ya está, y fin. Con sus santos cojones. ¿No había algo de una vacuna, de la peste o no sé qué? Aaah, sorpresa.   


Spoiler por la cara. 

En definitiva, una puta mierda. Una peli con presupuesto típico Cannon, es decir cuatro duros. Hecha con tan pocos actores que muchos llevan máscaras para poder salir más de una vez, con diálogos de mierda, un ritmo nulo, una historia que se cuenta a base de flashbacks, y que ni siquiera tiene un montón de acción. Lo más gracioso es que, misteriosamente, funcionó muy bien (la magia de los 80) y todo dos putas secuelas. No, corrijo, lo más gracioso es que en cuanto pueda me las veré.        


5 tunkas. Y porque no hay 6.

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